Aprovechando que hoy ha sido el día de la Tierra y dado que ya hace unas semanas vimos un robot para instalar en casa y que ayudaba con el reciclaje, quería buscar información acerca de algún robot que ayudase a mantener las ciudades limpias.
La pareja de robots que he localizado son los componentes de un proyecto que se presentó hace ya un año. Han aparecido durante este tiempo en muchos medios internacionales tanto online como en televisión.
Se trata del proyecto Dustbot y son muchos los ayuntamientos europeos y japoneses interesados en tener a los robots que lo componen en sus calles.
El proyecto Dustbot se desarrolló durante 36 meses y ha tenido un coste de 2.822.600 euros. En él han participado nueve partners de 5 países: Italia, Alemania, España, Suiza y Reino Unido.
La idea del proyecto ha sido desarrollar robots autónomos de dos tipos que pudieran trabajar en red y que fueran capaces de cooperar entre si para gestionar la higiene de una ciudad.
Los principales problemas que se quieren solucionar son la limpieza de las calles estrechas de los centros históricos de algunas ciudades y la posibilidad de ir casa por casa recogiendo las bolsas de basura.
Los dos diferentes robots son DustClean Robot y DustCar Robot.
DustClean se dedica a limpiar las calles y parques de la ciudad analizando además los niveles de polución. Pesa 250 kilos, tiene una capacidad de 20 litros y una autonomía de 4 horas alcanzando una velocidad máxima de 0,3 m/s.
DustCar puede recibir una llamada telefónica donde un vecino solicita un servicio de recogida de una bolsa de basura. El robot se desplaza guiado por su GPS y una serie de sensores que se colocan por la ciudad. Al llegar al lugar de la llamada recibe la bolsa y la lleva a uno de los puntos de depósito previamente definidos.
DustCar mide 150 cm. de altura y pesa 70 kilos. En su interior esconde una Segway que le permite una velocidad de 1 m/s y una autonomía de 16 kilómetros. Posee sensores de ultrasonidos y dispositivos láser que detectan los obstáculos a su alrededor y una pantalla táctil para interaccionar con los usuarios.
Al igual que nuestro amigo Simón, DustCar también dispone de un botón rojo por si hay que pararlo por alguna emergencia.
Podéis ver aquí un vídeo de la presentación en la localidad italiana de Pontedera.
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