Cuando hablamos de robots los solemos asociar al mundo moderno. A ciudades modernas con edificios modernos.
Sin embargo nos olvidamos de que robots no son solo Asimo, HRP-4 y compañía. No son solo esos bonitos robots humanoides que vemos en la películas hablando y realizando tareas imitando a los humanos.
Son millones los robots que hay ya trabajando en las empresas. Robots industriales capaces de desarrollar trabajos rutinarios de forma magistral. Capaces de cosas tan extraordinarias como tallar un casco de moto en un bloque de aluminio.
Y como no, también tenemos robots en el campo y las granjas. Desde hace ya tiempo existen robots que son capaces de ordeñar vacas.
Ahora uno de ellos evoluciona para conseguir una forma mucho más natural de ordeñar. Se llama Lely Astronaut A4.
Escuchamos desde hace mucho tiempo que el estrés al que se someten muchos animales en las granjas no es bueno para ellos y tampoco para los granjeros. Ese estrés provoca que la producción sea mucho menor.
Con las vacas pasa exactamente lo mismo. A más estrés menos leche.
Ahí es donde puede ayudar Lely Astronaut A4. Su sistema de ordeño potencia la libertad de la vaca y por lo tanto disminuye el estrés aumentando de esta forma la producción de leche.
Para la vaca es más fácil el acceso al habitáculo donde Lely le espera. Solamente debe de moverse en línea recta. Cuando ya se encuentra en posición, una cámara analiza la situación para que Lely pueda extraer la leche con facilidad.
El robot dispone de 4 dispensadores de comida para mantener al animal en perfectas condiciones mientras el silencioso brazo robótico de Lely ordeña a la vaca.
Además proporciona otros beneficios a los empresarios ya que por ejemplo permiten reducir los costes de personal, hay más control y aumenta la calidad de la leche.
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